Lanzan la antología “Rubén por nosotros” por el centenario del natalicio del escritor
“Es el más clásico y el más mexicano de nuestros poetas. Él supo combinar lo popular con lo culto. Le cantó a los trabajos del vencido; pero también al amor y a la mujer, a la muerte. Siempre con un sentido del humor juguetón”.
Así recuerda el poeta Vicente Quitarte a “su hermano mayor literario”, a “su amigo y maestro” Rubén Bonifaz Nuño (1923-2013), a quien hoy El Colegio Nacional y la Fundación para las Letras Mexicanas (FLM) le rinden un homenaje por el centenario de su natalicio.
“Apenas comenzamos a sentir su ausencia porque sus palabras, su calor y su estoicismo siempre estuvieron y estarán con nosotros. La primera persona del plural no es una figura retórica: el poeta supo crear una falange de los hijos que no tuvo, pero tiene. Forjó un nosotros solidario, alegre y poderoso”, afirma el también editor en entrevista.
“Lo consideramos un hermano mayor. Él nunca quiso ser un padre para nosotros, siempre quiso ser un hermano mayor. Yo nunca lo vi como un padre, porque siempre estaba cerca de nosotros. Y digo nosotros, porque éramos Sandro Cohen, Bernardo Ruiz, Marco Antonio Campos. Ese nosotros es invencible”.
Por esta razón, y retomando una idea del fallecido Cohen, tituló Rubén por nosotros a la antología que hoy se presenta, a las 18:00 horas, en El Colegio Nacional, y reúne tres poemarios del homenajeado: La muerte del Ángel, su primera colección de versos, “escrita bajo la luminosa sombra de Rainer María Rilke”, El manto y la corona y La flama en el espejo.
“Pensé que los tres libros eran una historia de principio a fin. Después, elegí un solo poema de Los demonios y los días, porque me gusta mucho. Pero es un libro muy amargo, muy preciso, del hombre de la calle que fue Bonifaz Nuño.
“Pasa lo mismo que con el poeta Alí Chumacero. Eran hombres de mucha vitalidad y de un buen humor contagioso; pero, en su interior, eran profundamente solos, profundamente amargos”, añade Quirarte.
Evocó a don Rubén como “el erudito lector de Charlie Brown que se daba tiempo para ver las aventuras de Don Gato, retratarse con Lucía Méndez y revisar, puntual y exigente, una pila de tesis de posgrado. Le fascinaba José Alfredo Jiménez.
Muy clásico y muy mexicano, Bonifaz también habló con la Dientona, la Huesuda, la Pelona, y lo hizo con sentido del humor, con irreverencia, casi con amor. En la plenitud de sus años, la provocó y le hizo burla. Se acercó a la muerte con una alegría enorme. El título de su último libro es Calacas, muy mexicano, juguetón, alegre”, señala.
El ensayista está convencido de que el traductor de los clásicos griegos y latinos “nos enseñó a reírnos de nosotros mismos. Era muy bromista, amable. Cuando le preguntábamos que cómo estaba, decía ‘pues, estoy fregado’; pero a los cinco minutos empezaba a reírse con esa sonrisa tan suya, tan graciosa”.
El catedrático de la UNAM detalla que los grandes temas que abordó Bonifaz Nuño son, además del amor, la mujer, el paso del tiempo y el hombre, “la idea del héroe lo ilumina a cada momento, porque pensaba que es el hombre de la calle el que resiste, el vencido.
Ayer (el lunes pasado) precisamente hubo en el Instituto de Filológicas un homenaje a su memoria y Martha Montemayor, hermana de Carlos, recordaba cómo los héroes que le gustaban a Rubén eran siempre héroes vencidos: Moctezuma, Cuauhtémoc.
HOMBRE VITAL, POETA SOLITARIO
Hoy se presenta a las 18:00 horas, en El Colegio Nacional, la antología compilada por Vicente Quirarte que reúne tres poemarios de Bonifaz Nuño: La muerte del Ángel, El manto y la corona y La flama en el espejo.
“Por eso escribí un libro que se llama Armados, en homenaje a un verso suyo que termina diciendo ‘para los que están armados escribo’. Creo que los que están armados son los que no tienen nada, y por eso tienen todo. Eso aparece mucho en la obra de Bonifaz. Por supuesto la mujer, el amor; pero también el amor al prójimo, el amor al otro, al hermano, al que está próximo a él”.
Quirarte piensa que la obra de Rubén Bonifaz tiene buena presencia en las librerías. “Sin embargo, creo que hay que reeditar su poesía reunida. Entiendo que el Fondo de Cultura Económica ya lo hizo. Pero sí haría falta que se pusiera en un solo volumen”.
En la presentación de Rubén por nosotros participarán además Miguel Limón Rojas, presidente de la FLM, y los escritores Nayeli García, Christian Peña y Paola Velasco
Excélsior
15//11//2023