Gabriela Jiménez

Gabriela Jiménez

Sexo, sin lágrimas y sin pudor

Adolescentes, sin motivo de vida

 Lleva el mundo más de año y medio con la pandemia por covid-19, suman 17 meses sin clases en forma, espacios importantes para cualquier adolescente, donde socializan y aprenden, no solo en lo académico, sino también en los procesos de comunicación esenciales para su desarrollo psicosocial.

En la actualidad, tras la pérdida de contacto con los amigos y al estar confinados en casa con los conflictos familiares, los adolescentes muestran desilusión. La idea de tener un proyecto de vida, una carrera y un trabajo bien remunerado, ya no es así.

¿Por qué? Las condiciones actuales no aseguran que esto se cumpla y priva la incertidumbre.

Se percibe que la dedicación, el compromiso, el estudio o un título universitario no van a tener su correspondiente compensación laboral y social. Así que, para los jóvenes, ya no resulta interesante comprometerse con un proyecto de vida.

Ante esta realidad, los chicos hacen un esfuerzo mínimo porque el riesgo de no tener éxito y sentir frustración, es demasiado grande.

Por otro lado, la familia ha cambiado. Ahora nos encontramos con padres más democráticos que dan mayor libertad a los hijos y cada vez se exige menos. Muchos jóvenes no tienen la necesidad de trabajar; otros, a pesar de vivir en una situación económica apremiante, dejan toda la responsabilidad a los padres y se justifican por la edad y la pandemia para quedarse en casa.

Para los jóvenes esta inactividad y apatía representan un riesgo. A largo plazo pueden generar serios problemas de autoestima, sentimientos de inferioridad y una gran frustración que, si no se pone atención, los llevará a la depresión y, en consecuencia, a la posibilidad del suicidio o a las adicciones.

Si su hijo atraviesa por alguna de estas situaciones, llámenos al 800-911-6666, opción 3, y le diremos qué hacer. Le invitamos a ver nuestro chat de sexualidad, todos los martes y jueves a las 18:00 por el Facebook de SimiRadio.