El boxeo ha sido fuente inagotable de historias para la literatura, con grandes autores como Ernest Hemingway, Julio Cortázar, Jack London y Norman Mailer, entre otros. Y también muchísimos argumentos con temas boxísticos se han realizado y adaptado para el cine con enorme y recíproca trascendencia.
En 1915, el genial Charles Chaplin dirigió y actuó en la cinta El campeón, en la que hace el papel de Charlot, un vagabundo que decide probar suerte en el boxeo, una historia premiada y reconocida en todo el orbe.
Sylvester Stallone con Rocky logró crear en 1976 al personaje Rocky Balboa que busca el sueño americano en el boxeo. Esta historia alcanzó enorme trascendencia en la historia del cine, con récords de taquilla y difusión, al punto que se hicieron 6 exitosas cintas y Stallone ingresó al Salón de la Fama del Boxeo en 2010, en Canastota, Nueva York, caso único en ese recinto.
Robert de Niro ganó el Oscar en 1980 con Toro salvaje, película basada en la vida de Jake Lamotta, campeón mundial de peso medio.
En 1960, Rocco y sus hermanos, con la gran actuación del actor francés Alain Delon. Gatica el mono, filme argentino dirigido por el cantante Leonardo Fabio en 1993.
Edith y Marcel, cinta francesa producida en 1983 como homenaje al romance que vivieron la cantante Edith Piaff y el campeón mundial de peso medio Marcel Cerdan a finales de los años 40.
Destacan también El campeón del director italiano Franco Zeffirelli, en 1979, y Huracán, con la actuación del estadounidense Denzel Washington, en 1999.
Cinderella Man, Zurdo, Carlos Monzón, Manos de piedra y Creed son otros títulos de exitosas películas.
En México, Campeón sin corona, del director Alejandro Galindo es la película más notable, narra la vida de Rodolfo “Chango” Casanova, ídolo del boxeo en los años 30 y 40, con memorable actuación de David Silva. En 1953, Pedro Infante inmortalizó a Pepe el Toro en la película dirigida por Ismael Rodríguez.
Sí, el boxeo es clave en la historia del cine y viceversa.