Álvaro Cueva

Álvaro Cueva

Frente a la Tele

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Cada minuto cuenta

Dígame, por favor, que usted ya vio completas las dos temporadas de Cada minuto cuenta.

Si ya lo hizo: ¡felicidades! Si no: luche con todas sus fuerzas por verlas en familia, con sus amigos, con sus compañeros. Luche por comentarla. Por convertirla en un clásico.

¿Por qué? Porque esta es una de las producciones mexicanas más importantes, más valientes, más positivas y mejor hechas de todos los tiempos.

¿De qué le estoy hablando? De una serie de dos temporadas que, desde el mes pasado, está disponible así, toda, en la plataforma PrimeVideo.

¿De qué se trata? Del sismo que sacudió a la capital de nuestro país, en 1985.

¿Qué tiene esto de importante? Primero, que nos hace recordar. Eso es fundamental para sensibilizarnos sobre lo que hemos cambiado, lo que hemos avanzado y, por si esto no fuera suficiente, porque podría ayudar a salvar vidas en lo futuro.

¿A qué me refiero cuando hablo de “valentía”? A que los responsables de esta joya se atreven a decir cosas que jamás se habían dicho, a criticar al gobierno, a denunciar irregularidades.

¿Qué tiene esto de positivo? Que es el más hermoso homenaje que jamás se le haya hecho a las mujeres y a los hombres de México. A nuestros valores. A nuestra solidaridad.

Si usted, como yo, está harto de que siempre que se filman series sobre México se aborden temas como los feminicidios, los secuestros y el narcotráfico, esta es la respuesta.

¿En qué me baso para afirmar que este trabajo del director Jorge Michel Grau es de lo mejor que se ha hecho en México?

Más allá de sus indiscutibles valores de producción, en que aquí se utilizan técnicas cinematográficas de última generación, recursos que nunca, absolutamente nunca, se habían usado en América Latina.

A esto súmele, por favor, las gloriosas actuaciones de talentos como Osvaldo Benavides, Maya Zapata, Antonio de la Vega, Gerardo Trejoluna, Miriam Balderas, Jesús Zavala, Azalia Ortiz, Luis Fernando Peña, Conchi León y Enrique Arreola.

En verdad, es una experiencia imperdible. Se la recomiendo de todo corazón.